
God’s People only by Grace
Fools say in their hearts, “There is no God.” They are corrupt, they do abominable deeds;
there is no one who does good. The Lord looks down from heaven on humankind to see if there are any who are wise, who seek after God. They have all gone astray, they are all alike perverse; there is no one who does good, no, not one. Have they no knowledge, all the evildoers who eat up my people as they eat bread, and do not call upon the Lord? There they shall be in great terror, for God is with the company of the righteous. You would confound the plans of the poor, but the Lord is their refuge. O that deliverance for Israel would come from Zion! When the Lord restores the fortunes of his people, Jacob will rejoice; Israel will be glad. (Psalm 14, NRSV)
Chepito was one of my friends who graduated together with me from High School in my country of origin, El Salvador, in the mid 70s. He was known because he did not believe in God and liked to argue with passion to defend his position on that. Chepito was not a bad person, he was generous and helped people in need. I was thinking of him as I read Psalm 14 and reflect in the ways the Psalmist refers to people that say in their hearts that “There is no God.”
Some people have thought that Psalm 14 is about the contrast between the wicked people of the world and righteous believers, and it is true that David speaks later in the psalm of “my people” (v 4) and “the righteous” (v 5). But David is not saying ‘They are bad’ and ‘We are good.’ He is contrasting what we human beings are by nature (wicked) and by grace (righteous).
The Psalmist starts with these important words: “The LORD looks down from heaven on humankind, to see if there are any who are wise, who seek after God.” (Psalm 14.2). The phrase, “humankind” refers to all human beings ever born. As human beings we are all stained with the results of Adam’s and Eve’s transgression, both with judicial guilt before God and with an inclination to wander away from him. And I don’t know if you agree with me, but every generation after Adam increases its sinfulness in discovering new ways to dishonor God.
David knew that his standing with God was only by grace. He knew Israel was God’s people only by grace, not because their natural moral character set them apart from the wicked people of this world (see Deuteronomy 9.4–5). The same is true for us today. As believers and disciples of Jesus Christ, we rejoice only in Christ; it is by his grace that we are what we are not because of our goodness, religious upbringing, or excellent character. Praise be to God!
Prayer: Gracious and loving God, help us to recognize that in our sinful nature we dishonor you in many ways. We thank you for your son Jesus Christ who forgives our sins, and by his grace we are saved and enter eternal life with you. Give us the strength we need to continue our journey as your disciples. In the name of our Lord and Savior Jesus Christ we pray. Amen.
The peace of Christ be with you,
Pastor Jorge,
Pueblo de Dios, Solamente por Garcia
Jorge Mayorga
Dice el necio en su corazón: «No hay Dios.» Se han corrompido, hacen obras despreciables,
no hay quien haga lo bueno. Jehová miró desde los cielos sobre los hijos de los hombres,
para ver si había algún entendido que buscara a Dios. Todos se desviaron, a una se han corrompido; no hay quien haga lo bueno, no hay ni siquiera uno. ¿No tienen discernimiento todos los que cometen maldad, que devoran a mi pueblo como si comieran pan y no invocan a Jehová? Ellos temblarán de espanto, porque Dios está con la generación de los justos. De los planes del pobre se han burlado, pero Jehová es su esperanza. ¡Ah, si de Sión viniera la salvación de Israel! Cuando Jehová haga volver a los cautivos de su pueblo, se gozará Jacob, se alegrará Israel. (Salmo 14. Versión Reina Valera 1995)
Chepito era uno de mis amigos que se graduaron junto conmigo de la secundaria o bachillerato en mi país de origen El Salvador a mediados de los 70’s. El era muy conocido porque no creía en la existencia de Dios, y le gustaba argumentar con pasión para defender su postura al respecto. Chepito no era una mala persona, el era muy generoso y ayudaba a la gente en necesidad, pero no creía en Dios. Yo estaba pensando en el cuándo leía el Salmo 14 y reflexionaba en las maneras en que el Salmista se refiere a aquellas gentes que dicen que “No hay Dios.”
Algunas gentes han pensado que el Salmo 14 es acerca del contraste entre gente malvada de este mundo y los creyentes justos, y es cierto que David habla mas tarde en el salmo de “mi pueblo” (v.4) y “los justos” (V. 5) Pero David no está diciendo “que ellos sean malos” y “que nosotros somos buenos.” El esta contrastando lo que nosotros como seres humanos somos por naturaleza (malvados) y por gracia (justos).
El Salmista comienza este Salmo con estas palabras importantes: “Jehová miró desde los cielos sobre los hijos de los hombres, para ver si había algún entendido que buscara a Dios.” (Salmo 14: 2). La frase “Humanidad” se refiere a todos los seres humanos que han nacido. Como seres humanos nosotros todos hemos sido manchados por la transgresión de Adan y Eva, ambos con una culpa judicial ante Dios y con la inclinación a alejarnos de Dios. Y yo no sé si ustedes están de acuerdo, pero cada generación después de Adan, ha incrementado su naturaleza pecadora en descubrir nuevas maneras para deshonrar a Dios.
David sabia que su postura ante Dios solamente era por gracia. Sabía que Israel era solamente Pueblo de Dios por la gracia de Dios., no por su naturaleza de carácter moral que los había apartado de los malvados de este mundo (ver Deuteronomio 9: 4-5). Lo mismo es cierto para nosotros hoy día como creyentes y discípulos de Jesucristo, nos regocijamos solamente en Cristo; y es por su gracia que nosotros somos lo que somos, no por nuestra bondad, y como hemos sido enseñandos religiosamente, o por un carácter excelente, sino por su gracia. ¡Alabado sea Dios!
Oración: Dios de gracia y amor, ayúdanos a reconocer que por nuestra naturaleza pecadora te deshonramos de muchas maneras. Te damos gracias por tu hijo Jesucristo quien perdona nuestros pecados, y por que por su gracia somos salvos y entramos a la vida eterna con él. Danos la fortaleza que necesitamos para continuar nuestro caminar como tus discípulos. En el nombre de Jesus nuestro Señor y Salvador, oramos. Amen.
La Paz del Señor sea con ustedes,
Pastor Jorge